
Acción: Siglo XXI. Sevilla. Una primavera cualquiera de un año cualquiera. Pensamientos que van y vienen.
… a ver, a ver.
… cámara de fotos, tarjeta de memoria vacía, móvil, baterías cargadas …
… gayumbos y calcetines limpios, neceser mini, pijama …
… mi polo rojo sevillista, bandera centenaria, bufanda (lo del sombrero no me va) …
… el billete de avión y la entrada.
Creo que lo tengo todo.
Ah, el navegador, por si acaso, que Barcelona es mú grande.
Ya he quedado con mi hermano, bien tempranito, vamos en su coche hasta el aeropuerto…
… que no se me olvide el pdf del Club sobre la final, con todos los consejos e instrucciones para pasar el día …
DNI, algo de dinerito suelto, tarjetas de crédito …
Qué ganas tengo de pisar la fan zone, ver a mis primos, a los “monge”, a mi tío, a los guardianes de la memoria desplazados, a los amigos …
Abrazos, cánticos, la arenga del Presidente …
Otra vez …
La noche antes, la foto premonitoria, en casa, con mi mujer y mi niña, abrazando nuestra bandera …
Tengo que encargar todos los periódicos en el kiosko de Mati …
Y la noche de la final, hay que cenar los “filetes de la suerte”, pollo empanado con patatas fritas, entre gol y gol de nuestro Sevilla.
Otro año igual … pero no es lo mismo.
Otra vez protagonistas …
Otra vez ¿campeones?...
Ojalá.
No. No es un sueño.
Una primavera cualquiera de un año cualquiera.
Nos vemos en Barcelona.